¡Hola a todos!
Hoy quiero hablarles de un episodio en Twitter que sacudió
a los millennials anglófonos y que resultó en algo muy, pero muy gracioso. Creo
que es evidente el desprecio que algunos sienten hacia nuestra generación, y
esa creencia se evidenció en septiembre de este año, cuando el hashtag
#Howtoconfuseamillennial, literalmente #Comoconfundiraunmillennial, se
popularizó en la red social.
Los tuits, satíricos e irónicos en su inmensa mayoría,
hacían alusión a los estereotipos que se le han adjudicado a la Generación Y:
que si somos perezosos, que si no nos gusta trabajar, que tenemos mala ortografía,
que somos demasiado sensibles, que sentimos que el mundo se acaba si no hay
Wifi.
Esta es una compilación de las publicaciones que llamaron
más la atención, debo admitir que algunas me dieron risa:
#Comoconfundiraunmillennial – Pásales un formulario de
solicitud de empleo.
#Comoconfundiraunmillennial Muéstrales cómo es un GPS
antiguo.
#Comoconfundiraunmillennial ¡¿Cómo que no hay Wifi?!
#Comoconfundiraunmillenial Explícales que aumentar el
sueldo mínimo aumentará el costo de su latte diario
Explica cómo solíamos ser sociables antes de los medios.
#Comoconfundiraunmillennial
¿Dónde está la medalla de participación?
#Comoconfundiraunmillennial
Sin embargo, la naturaleza rebelde de los millennials no
dejó que se quedaran callados. He aquí algunas contestaciones que se merecen un
aplauso:
#Comoconfundiraunmillennial
Destruye el mercado de bienes raíces
Remplaza los trabajos por pasantías no remuneradas
Diles que compren una casa.
#Comoconfundiraunmillennial llora por los adolescentes que
están desperdiciando su vida en las redes sociales y luego crea una etiqueta en
una red social para quejarte de ellos.
#Comoconfundiraunmillennial Sé racista, homofóbico y
transfóbico; y luego quéjate sobre lo irrespetuosa que es esta generación.
Y, sin duda alguna, mi favorito:
Los Baby Boomers tuitean #Comoconfundiraunmillennial y
luego nos llaman para que arreglemos sus problemas de Internet 30 segundos
después.
Definitivamente, creo que un asunto como este no debe
significar una guerra entre generaciones, porque eso sería absurdo. De lo viejo
y de lo nuevo tenemos que aprender, y las risas nunca están de más. Es probable
que los millennials también se quejen de la generación de sus hijos o de sus
nietos, y así sucesivamente. Sin embargo, creo que a partir de esta etiqueta
todos los usuarios de medios sociales pueden aprender una gran lección: no
esperes que los millennials, que son el target principal del mundo virtual,
sean pasivos ante el contenido que se publica en las redes sociales.
¡Feliz fin de semana!
Cristina.-
